La Unidad de Fraude y Falsificación de Investigaciones del Este del Condado ha visto un aumento en las estafas telefónicas de las fuerzas del orden. Los sospechosos de estafa se hacen pasar por agentes del orden reales por teléfono y solicitan el pago de las órdenes de arresto pendientes. La estafa comienza cuando el sospechoso llama a la víctima por teléfono. El sospechoso falsifica su número de teléfono para que parezca que llama desde una agencia de seguridad pública real, como la estación de policía de Thousand Oaks. El sospechoso de la estafa se hace pasar por un agente o un agente del orden público y le dice a la víctima que tiene una multa pendiente, una citación judicial no presentada o una orden de arresto y solicita el pago.
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